La Bodeguita Mi Pueblo de Olvera estrena un menú degustación para dos personas en el que ofrece una original versión de la cocina serrana que arrejunta clásicos como las sopas pegás o las gachas con platos innovadores como un salmorejo de uvas o unas croquetas acompañadas con alioli de frambuesas

 

«Hemos querido hacer una muestra de la cocina de la Sierra de Cádiz pero dándole un toque divertido» señala Paco Medina, el gerente de La Bodeguita Mi Pueblo, uno de los bares más «inquietos» de esta población serrana. Hoy viernes el establecimiento, un local pequeño con aires de taberna que complementan cuando el tiempo acompaña con una terraza situada sobre el cesped de un parque colindante, estrena su menú degustación «Sierra de Cádiz» que tiene como peculiaridad, al igual que otras propuestas que ha hecho el establecimiento en los últimos meses que está pensado para compartir entre dos personas: «porque eso le da un toque divertido» estima el cocinero que ha diseñado esta propuesta gastronómica junto a su esposa y jefa de cocina del establecimiento, Lola Jiménez.

«No queríamos algo clásico y nostálgico. Queriamos ofrecer la cocina de la Sierra de Cádiz desde un punto de vista divertido y cercano al mundo de la tapa». Así el menú que han diseñado, que habrá que reservar previamente los días laborables y que estará disponible sin reserva previa los fines de semana, consta de seis platos, postre incluido y tiene un costo de 45 euros, aunque la cuenta es para dos, por lo que sale a 22.5 por persona. No lleva bebidas y «el cliente podrá optar por el acompañamiento que quiera o lo podremos diseñar según sus gustos un maridaje».

El hostelero Paco Medina con el salmorejo de uvas, uno de los platos que integran el menu degustación Sierra de Cádiz. Foto: Cosasdecome.

El establecimiento tiene una carta integramente formada por vinos de la provincia de Cádiz (verla aquí) en su intento por impulsar lo local «porque tenemos cosas muy valiosas por aquí».

Una de las sorpresas de este menú degustación es un aprovechamiento diferente de uno de los tesoros de la provincia, la uva, también presente en la sierra gaditana. Medina y Jiménez aprovechan esta fruta, sustituyéndola por el tomate, para elaborar una variante del salmorejo. «Hacemos la crema sólo con aceite y uvas, además de un toque de vinagre, pero no hay tomate» señalan. El resultado es muy agradable, con una crema ligeramente dulzona pero que sabe a esta conocida sopa fría andaluza. Por lo alto tropezones de anchoas y de huevo duro rallado.

Media docena de salmorejos fresquitos y con un puntito diferente

El menú, que acompañan con un pan cercano al mollete de Santiago Cabrera de Olvera, comienza con unas rodajas de lomo en manteca que se sitúan sobre un trozo del tan de moda pan brioche untando para la ocasión con un poco de manteca blanca de cochino. El pan va ligeramente tostado. En el mismo plato se sirven también unas croquetas que llevan tropezones de caña de lomo o de morcón, dependiendo de las disponibilidad. El toque original el acompañamiento con un alioli de frambuesas, «porque hay que tener en cuenta que los frutos rojos también son un producto muy serrano».

Uno de los platos más famosos del establecimiento, las sopas pegás, van adornadas con un tartar de salchichón y unos pegotoncitos de alioli de aceitunas partías, en un homenaje al aceite de oliva de la localidad, muy conocido.

Las sopas pegás, conocidas también con otros nombres en la Sierra de Cádiz, son uno de los platos más singulares de la cocina de la zona. Tienen apariencia de tortilla, pero ni hay huevo, ni patatas, sino que se elaboran a base de pan remojado en agua y que se va moviendo hasta que se evapore todo el líquido.

La «zopa» serrana de los mil nombres… y que se disfraza de tortilla

El último de los platos de la parte salada son unas costillas de cerdo deshilachadas que se colocan sobre unas patatas fritas a cuadritos, el toque «suavizante» es una crema de coliflores.

Las gachas. Foto: Cosasdecome.

El broche final lo ponen con unas gachas, el plato más conocido de la cocina andaluza de «los tiesos» y que se elaboran tan solo con leche y harina. En la Bodeguita aligeran la densidad de la crema para que sea más amable y sustituyen los trozos de pan frito que la acompañan por unos frutos secos picados, con la misma idea de «modernizar» algo la propuesta.

El menú, que se mantendrá en carta hasta la llegada de la Primavera, fue presentado en un acto en el que los platos se acompañaron con diversos vinos de las bodegas Barbadillo que fueron presentados por el enólogo de la firma Juan Carlos Barrera, acompañado para la ocasión por el jefe de sala y somelier del restaurante Cooking Almadraba de Conil, Fran García Corbeto.

Horarios, localización, teléfono, la carta completa y más datos de la Bodeguita Mi Pueblo, aquí.

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