El establecimiento mete bolas de helado en el interior de un brioche calentito. El viernes 26 de abril, esta nueva especialidad será la protagonista del acto que celebrará la década, que recaudará fondos para el comedor Virgen de Valvanuz.
En 2014 se inauguraba en la calle Plocia la heladería D`Plocia. A esta céntrica vía del casco antiguo, llena de bares y restaurantes, le hacía falta un establecimiento que pusiera el toque dulce a las sobremesas. Fue Jesús Navas quien lo inauguró, pero hace tres años cedió el testigo a Ignacio López Ruiz, que este año se prepara para soplar las velas del décimo cumpleaños.
López Ruiz explica que la clave de este negocio es que elaboran ellos mismos todos los helados, con leche entera y con una nata con un 38% de grasa, lo que da a los helados su característica textura. Durante la década, algunos ya se han hecho muy conocidos, como el que tiene el nombre de la calle, El Plocia, y que tiene entre sus ingredientes la avellana y el chocolate. O el Paraíso, con chocolate blanco, una capa de pistacho y frutos rojos. Tienen mucho éxito también el de mango y el de pistacho. Este último, elaborado con pistacho puro de California, ha sido reformulado para esta temporada, y ahora se pueden encontrar en el también el toque crujiente del fruto seco.
El interior del establecimiento.
Y es que cada temporada trae novedades. Este año hay un buen número de estrenos: el happy hippo, la Tarta de San Marcos, el de Baileys, el de limonchelo y uno salado, el bretzel.
Pero la novedad más destacada es el Ovni de Plocia, un original helado metido en un brioche que está caliente por fuera y frío por dentro. En el establecimiento se han inspirado en un helado siciliano para elaborarlo. El cliente elige su sabor de helado preferido, que se introduce en el interior de un brioche que lleva nata en la propia miga. El brioche, ya con el helado, se mete en una especie de tostadora especial durante 30 segundos que calienta el brioche, lo cierra y confiere a la pieza una forma que le da un aire de Objeto Volante No Identificado. El cliente recibe su ovni calentito por fuera, pero con el helado frío y sin derretirse en el interior. El proceso puede verse en este video:
Este nuevo helado metido en pan dulce será el protagonista de un acto previsto para el viernes 26 de abril. Ese día, los ovnis se despacharán por la voluntad (su precio de venta al público es de 3,20 euros), y todo lo recaudado se destinará al comedor social gaditano Virgen de Valvanuz, desde las 13:00 y hasta el fin de existencias.
Más tiempo abiertos y muchas opciones
La fachada del local, en la calle Plocia.
La heladería D’Plocia no sólo ha ido ampliando su catálogo de helados durante estos diez años. El establecimiento cada vez abre más tiempo, alargando la temporada. Este año empezaron a despachar helados el 1 de febrero, y López Ruiz ve cercano el momento en el que ni quiera cierren.
Otra de las claves del establecimiento, además de la buena sintonía con los bares y restaurantes del entorno, que muchas veces cuentan con ellos para sus postres, es que tienen opciones para todos los públicos: hay barquillos sin gluten (y además, al mismo precio que los que sí lo tienen) y opciones sin azúcar, sin lactosa y para veganos. En el establecimiento tienen cuatro tamaños de tarrinas (los precios van de 2,80 a 4,30 euros), tres de barquillos (de 2,70 a 3,80 euros), dos de granizadas (de 2,60 y 3,20 euros) y dos de batidos helados (3,20 y 3,70 euros).
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