Trisnina, el establecimiento abierto por Mauro Barreiro en la céntrica calle Zorrilla de Cádiz, ofrece unos chicharrones hechos al momento y acompañados por lima. Lo de «hecho al momento» en unos chicharrones es un reclamo que no puede ignorar un buen tapatólogo, así que los pedimos. Los chicharrones son de los gorditos y llegaron en un platito blanco con el nombre del bar, formando un montoncito en el centro; a un lado, un gajo del cítrico. El olor prometía.
Como cabría esperar en unos chicharrones recién fritos, llegaron muy calentitos, jugosos y maravillosos ellos: crujientitos por fuera y blanditos por dentro. La lima, que aquí reemplaza al tradicional limón, le da un toque como fresquito, así que no hay que olvidar exprimirla a todo lo que dé. Sobresaliente versión de los chicharrones, que sitúa al recién inaugurado establecimiento gaditano entre un lugar de peregrinación a tener en cuenta entre los aficionados.
Mauro Barreiro explica las claves de este plato: se elaboran básicamente de la forma tradicional, con panceta y papada, que cortan en un tamaño más bien generoso. Primero se cocina en la manteca lentamente, y después se va subiendo la fuerza al fuego. Antes de que estén listos del todo, se corta la cocción. Cuando el cliente lo pide es cuando se terminan del cocinar. Ya sólo falta la lima, con la que se busca dar el contrapunto al plato.
Los chicharrones cuestan, en febrero de 2023, 5,5 euros.
El sitio ha cerrado.