La versión con más seguidores del paté de cabracho. Fue el pionero en la provincia. Lo trajo el cocinero Fernando Córdoba que lo había hecho en un restaurante donde había estado haciendo prácticas. El plato va camino ya de los 40 años fijo en la carta de El Faro y se ha convertido casi en un plato típico de la provincia, sobre todo en la navidad, en que es un fijo en muchas casas.

Cremoso, de un atractivo color naranja, de sabor suave, lo sirven con un poco de mayonesa y unas tostatidas para untarlo en condiciones.