Jesús Rodríguez Arias señala:
Este pasado jueves en nuestra particular «escapada de ida y vuelta» fuimos, como todos ya sabéis, al Poblado del Pantano del embalse de Los Hurones, en el término municipal de San José del Valle, Provincia de Cádiz.
Y allí descubrimos un lugar único como también lo es la Venta «El Pantano».
Soy de los que me gusta descubrir lugares que embriagan el alma y también el paladar y esta venta lo es.
Situado en el edificio de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir esta venta da de comer todos los días a los operarios que trabajan en el embalse amén de aquellos que van específicamente o se encuentra con este maravilloso lugar.
Los fines de semana y festivos ya es harina de otro costal pues son muchos los que van expresamente a comer en un lugar donde se mima la comida de toda la vida, de recetas casetas y fogones que a muchos nos retrotraen a nuestra infancia.
Allí tanto Hetepheres como yo probamos platos que escogimos después de que nos informaran que todo era casero.
Una ración surtida de croquetas caseras, con una bechamel jugosa que hace que sin mirar sepas el delicioso sabor de cada una de ellas. Las de berza, jamón, puchero, están verdaderamente espectaculares. Las que son más innovadoras también.
Después Hetepheres comió un plato de patatas bravas con salsa casera. ¡Deliciosa!
Yo pedí, tengo gustos muy clásico y más cuando estoy en un lugar como esta venta, guiso de jabalí con patatas fritas.
Carne tierna, muy sabrosa, con una salsa que invitaba a mojar pan moreno de toda la vida y unas papas fritas caseras muy buenas. Gocé el plato que estaba para hacerle una pleitesía…
Los fines de semana me han comentado que ponen una ensaladilla rusa buena, buena, una sopa de tomate que te deja esmorecío…
Para mí un verdadero y grato descubrimiento tanto la Venta «El Pantano» como el Poblado del embalse de Los Hurones.
Eso sí, tal es la demanda, que en fines de semana y festivos se aconseja llamar con anterioridad para reservar mesa si no se quiere esperar amplia cola.
Cuando a un restaurante le sucede eso, que son muchos los que quieren comer allí, es que están haciendo las cosas muy bien. Comida salida de los fogones de toda la vida, en un lugar incomparable y con unos buenos y cercanos profesionales a los que doy la enhorabuena.
Tenemos que volver ya sea un finde de estos, reservando antes por supuesto, o a partir del martes para caminar algunos de sus senderos y terminar dando buena cuenta a los sabrosos platos que ponen en nuestra mesa. Venta «El Pantano»: 100% recomendable.

El tapatólogo acompaña su informe con la foto de arriba.