Las almejas a la marinera de Casa Manolito
Tapa
Las almejas a la marinera de Casa Manolito
Tapatólogo descubridor:
Población
Día de hallazgo
Descripción

Puerto Real es la capital mundial de las almejas a la marinera. Hay varios sitios que bordan la receta y además sin pamplinas, ni tropezones de jamón, ni champiñones, ni ná de ná, almejas y salsa. Una de las versiones más sobresalientes es esta que ponen en Casa Manolito con almejas de tamaño generoso y una salsa en estado cremosito que necesitó casi dos vienas para “achicar” la salsa que venía en el plato…no fuera a desbordarse.

La obra maestra corresponde a los hermanos  Manoli y Manolo Andrades Serrano que regentan este establecimiento casi camuflado en el polígono industrial de El Trocadero de Puerto Real. La receta de estas almejas es de esas con historia. Manolo estuvo muchos años en La Marina, que era toda una institución en Puerto Real y que se hizo famoso, entre otras cosas, por sus almejas a la marinera. Manolo se llevó allí 15 años y aprendió a bordar la receta que ahora la familia desarrolla con la misma fórmula en Casa Manolito. Lo que han cambiado ha sido el vino ya que para “alegrar” a las almejas a la salsa le ponen manzanilla en rama, de la de barril, de Barbadillo y luego un poquito de aceite de Olvera, una mijita de harina para espesar el caldo y el jugo que sueltan los bivalvos (palabra trécnica para darle nivel al artículo). Si la ración se come entre dos, sugiero hacer una raya en medio, porque luego hay bronca…lo advierto, porque las almejas están pa matarse y hay gente que corre más que Fernando Alonso.

La ración sale a 15 euros (precio a mayo de 2019) y las acompañan de minibaguetinas de pan.

¿Quiere saber más sobre las almejas y Puerto Real? aquí un reportaje. 

El descubrimiento pertenece a las ciencia de:

Barquiriosis pánica: Ciencia que estudia el fenómeno de hacer barquitos de pan en salsas de gran densidad especialmente en las que contienen almejas u otros bivalvos que se ingieren por la técnica del sorbido.

…Y para acompañar

La Goya