Tamara Cansino y Jesús Recio, los empresarios hosteleros que fundaron el Valvatida de Jerez, abrieron este restaurante en casco antiguo de Cádiz el 4 de abril del 2017, en un local con una decoración entre lo rústico y lo industrial con barra, mesas altas, bajas y largas. Posteriormente, en 2021, cambió de manos aunque siguiendo en la misma línea (más datos aquí).

El sitio ocupa unos 200 metros cuadrados. En lo gastronómico se come a base de platos para compartir a un precio moderado. La constante de la casa es fusionar diversas culturas gastronómicas con productos de la zona produciendo «obras», aunque la carta cambia constantemente en función del mercado, como un wok de ternera de La Janda o unas croquetas de lomo en manteca. Postres cuidados y amplio apartado de sugerencias.

Aquí una crónica más detallada de Sonámbulo.