Las instalaciones se han convertido en uno de los principales atractivos turísticos de la localidad, y ya cuenta con un incipiente rincón gastronómico.
Se llama Mercado de Abastos Andalucía, aunque debería llamarse El Templo del Atún. La Plaza de Barbate está formada por una única planta rectangular de techos altos y ventanales amplios. Su mayor atractivo, hasta 2017, eran sus puestos. Ahora, estos compiten con la llamativa decoración.
El Mercado de Barbate es uno de los más espectaculares y bulliciosos de la provincia, por dentro y por fuera. Se llena de gente dispuesta a comprar, pero también de visitantes que no se quieren perder su vistoso interior, inspirado en el templo de una deidad fenicia, Melkart. El nuevo aspecto del mercado ha incrementado notablemente las visitas… y también las ventas.
Los atunes y motivos marineros de techo y paredes hacen que parezca que el mercado está sumergido en el fondo del mar. Bajo la mirada de Melkart se puede comprar -lógicamente- atún y otros pescados, pero también fruta y verdura, o tapear en el incipiente rincón gastronómico que ya cuenta con un puesto de pasteles árabes, un bar de tapas y un freidor. Fuera, en el exterior, hay una Charcutasca y otro bar de tapas, además de la más tradicional churrería. También allí encontramos a uno de los puestos más veteranos, donde se vende una hierba con propiedades medicinales que se recoge en el municipio… Pero vamos por partes.
El autor de la decoración es Hoko, Francisco Jesús Alvarado, y su equipo. Quisieron representar un templo porque, siendo barbateños, saben perfectamente que «la filosofía y la vida de aquí es la almadraba y el atún». Escogieron un dios fenicio porque fue esa civilización la que inventó el arte de pesca de la almadraba, además de la mojama, por ejemplo. Para Hoko, la ambientación del mercado no ha terminado: aún falta unas estructuras colgantes, unas lámparas, que tendrán forma de pez y luces que simulen el efecto del agua.
Pero ya a día de hoy y desde que se inauguró «es un atractivo muy grande. Es más, la gente del mercado multiplicó por siete las ventas en ese año». El antiguo Mercado de Barbate tenía puestos vacíos, y ahora «la gente está deseando coger puestos para montar sus negocios». Los murales marinos han «devuelto la vida» a este espacio «y ha hecho que la gente venga. Mira cómo está el mercado», explica Hoko señalando a la gente que llena las instalaciones, alrededor suya.
Esta gente, explica, acude para conocer las pinturas que a visto por Internet o porque alguien se lo ha contado «y lo que pasa es que al visitarlo también dice: mira, me llevo unas almejas. Al final es un atractivo que aprovechamos, la gente viene y compra».
Comer en el Mercado
En el Mercado no solo se puede comprar: también se puede tomar algo. En el interior están los puestos Möunia, dedicado a los pastelitos árabes; El Árraez, con sus papelones de pescado, tostas y montaditos, y el freidor Las Niñas, que son los que actualmente forman un incipiente Rincón Gastronómico. En el exterior encontramos la Charcutasca y Cerveza y Pescaíto. El presidente de los comerciantes del mercado, Fernando Rivera, explica que el Ayuntamiento está reservando los puestos de la zona interior del mercado situada al fondo a actividades hosteleras, para ir creando este nuevo espacio.
Rivera es también el propietario de un puesto del exterior, la Charcutasca, que está a medio camino entre la oferta hostelera que tanta fuerza está tomando en los mercados de la provincia y la propuesta tradicional de venta. Se hizo con este puesto, inicialmente una charcutería, en 2011, y un año más tarde lo transformaba en «charcutasca». Explica que todo empezó porque unos amigos adoptaron la costumbre de acudir al puesto con unas cervezas, y le propusieron que fuera él mismo el que las vendiera. Poco a poco se incorporaron los vinos, las tapas, y ahora cuenta con una terracita que quiere ampliar. Sirve jamón, queso, caña de lomo… en papelones, y se acompañan normalmente de cervezas -vende entre 150 y 200 botellines diarios-, mistela mezclado con vino chiclanero o riojas, entre otras bebidas. Además, sigue con la actividad tradicional de la charcutería.
Muy cerca, también en el exterior, está Cerveza y Pescaito. Enrico Italiano ha transformado el puesto 42 en un bar de tapas en el que el protagonista es el atún. Enrico no es solo italiano de apellido, sino también de nacionalidad, pero lleva muchos años afincado en la provincia. Ha estado quince años trabajando en restaurantes de Tarifa como La Pescadería o Lola, pero siempre ha soñado en montar algo propio, «algo chiquito que pudiéramos llevar entre otra persona y yo». La oportunidad surgió cuando quedó este puesto libre. Acudió a verlo en julio de 2021 y el bullicio y el ambiente de la zona le convenció. Junto a él trabaja Laura Enciso, también con una larga trayectoria que incluye haber trabajado con Martín Berasategui, El Laúl de El Puerto y tres años, también como cocinera, en Dublín.
En la terraza de Cerveza y Pescaito se pueden probar tapas elaboradas con atún rojo de almadraba, como tiraditos hechos con ventresca, causa limeña, o también una versión del famoso bocadillo con calamares que es un montadito de chipirones. Hay muchos platos de fusión, y es que han viajado tanto por Asia como por Perú. Además, no falta tampoco una cocina más autóctona, como una ensaladilla de langostinos que ya destacó en los tiempos de La Lola. Puedes ver un informe tapatológico completo aquí.
Enrico está satisfecho con la decisión de abrir su propio negocio en este puesto: «el mercado es fantástico, tiene todos los productos de la zona, la ternera retinta, el queso payoyo, fruta y verdura de Conil, pescado de la Bahía y, naturalmente, atún de almadraba. Es la primera atracción turística del centro de Barbate».
Seguimos en la parte exterior porque aquí está uno de los puestos veteranos, y de los que más miradas atrae: el puesto de especias de Elvira Oliva, que regenta Gertrudis Redondo. «El puesto lleva muchos años abierto. Yo lo tengo desde el 2007, pero anteriormente mi tía Elvira se llevó 30 años con él y antes lo había llevado otro señor desde que inauguraron esta plaza», explica rodeada de pequeñas bolsas de especias. No solo estas le dan un aire peculiar a este pequeño espacio, sino también piezas antiguas de todo tipo (radios, figuras) que colecciona en el interior. Lo que más se vende es el orégano fresco, los huevos de campo o el tomillo, aunque hay otra especialidad muy reclamada: la zahareña o rabo de gato, una hierba que crece «en la parte del Tajo hacia abajo, para Los Caños» y a la que se atribuyen propiedades curativas: es bueno para el estómago y también para la piel.
La visita al mercado no concluye aquí. También conviene parar para tomar unos churros en la churrería La Plaza, o rematar la jornada andando un par de minutos para comprar alguno de los dulces de la confitería Tres Martínez…. una visita imprescindible para saber que en Barbate el atún tiene también su lado dulce.
En los alrededores también algunas tiendas dedicadas al atún y las conservas como las de Gadira, Herpac o La Chanca. Aquí más info sobre tiendas gourmet en Barbate.
Más información sobre el Mercado, aquí.
…Y además
- Aquí, los sitios para desayunar en Barbate.
- Y aquí, los sitios para tapear.
- La Guía Gastronómica de Barbate al completo.
- En este enlace podrás encontrar todos los productos y recetas típicas de Barbate. Pero muchas veces no encontramos bares donde disfrutar de la cocina de la localidad…aquí los tienes todos.
- Aquí, bares y restaurantes para comer atún en Barbate.
Este es el tercer capítulo de la serie Mercados con encanto que elabora Cosasdecome con el patrocinio de Patronato de Turismo de la provincia de Cádiz. Aquí más info sobre la serie y los capítulos publicados.
Y un video sobre los desayunos en Barbate: