Visitar el local de Rafael Vázquez es toda una experiencia que se acompaña con vino y una tapa gratis. En junio abrió su cuarto local que sustituirá al de la calle Monteros en mayo de 2025

 

 

No hay vidas para hacer todo lo que Rafael Vázquez cuenta que ha hecho. Escritor, pintor, cantante, cineasta, amante del flamenco, bohemio… artista en general. Y por encima de todo, tabernero. Rafael es la persona y la personalidad detrás de la taberna Ke Arte, conocido popularmente como El Manicomio, en el barrio alto de Sanlúcar.

Todo un personaje local que ha regentado cuatro tabernas con el mismo nombre desde el 1998, porque ha ido cambiando de ubicación con los años. La cuarta, Bodegón Arte 3, en la calle Descalzas, donde estaba el Bodegón Ochele será la única en varios  meses: “Porque ese local sí lo tengo en propiedad”, dice Rafael. Como muy tarde en mayo, la de la calle Monteros cerrará sus puertas. Todo se trasladará al nuevo local que está abierto desde del 13 de junio, día de San Antonio.

Mucho trabajo va a tener Rafael con la mudanza de los centenares de cuadros, de todo lo que uno se pueda imaginar: actores de cine clásico, pintores, monumentos (algunos son collages que el propio Rafael ha hecho con recortes de carteles), cuadros y fotos, muchísimas fotos de toreros y cantaores flamencos. Incluidas las réplicas de las Llaves del Cante Flamenco, la primera otorgada en 1868 a El Nitri, y la de Antonio Mairena en 1962.

La taberna sirve bebidas y una tapa gratis. Foto: Cosas de Comé

Porque El Manicomio es un sitio donde los cantaores están a gusto tras algunas manzanillas, y cantan con la pureza de una garganta caliente por el vino, y sin la presión de un tablao. Por esas “pajarracas” que se forman entre copas (que con solo estar allí cinco minutos son fáciles de imaginar), tomó el apodo de “el manicomio”, nombre que, ahora sí, luce Rafael con orgullo en el exterior de la nueva taberna.

Rafael Vázquez, todo un persona sanluqueño. Foto: Cosas de Comé

Aquello es un bar para beber. Siempre se han mantenido sin cocina (en el nuevo local sí tiene), ofreciendo una tapa gratis con cada copa: “Para que tengan buen paladar para cantar”, dice Rafael. Tapa de comida casera, que puede ser tortilla, filetitos, riñones, arroz (sencillo, de carne, pero muy rico), según el día.

Higaditos de pollo en la nueva taberna de la calle Descalzas, Bodegón Arte 3. Foto: Cosas de Comé

Mientras, Rafael cuenta infinitas anécdotas y enumera otros tantos nombres de flamencos (Manuel Agujetas, Camarón, Rancapino, Paco de Lucía…), algunos incluso han pasado por allí. Cuenta, canta y recita con un gorrión de manzanilla a un lado. Está siempre dispuesto a hacer un recorrido por la exposición de sus paredes, donde ha colocado réplicas de las Llaves de Oro del Cante, y ha hablar de sus libros, discos y su breve documental sobre la Expo de Sevilla.

Exterior del nuevo Manicomio, que ahora tiene terraza. Foto: Cosas de Comé

En el nuevo Manicomio se exponen ya parte de esos recuerdos, aunque todavía hay muchos huecos que llenar. El local es más amplio que el antiguo, tienes mesas bajas y altas, una barra, terraza y hechuras de bodeguita. En la mente de Rafael están algunos cambios, como dividir el local en dos zonas. Tras la barra está su ex mujer Remedios, con la que trabaja dándole un toque aún más singular a la historia.  No tiene la solera de las maderas viejas que huelen a paso del tiempo ni el encanto de su pequeñas dimensiones,  pero lo que no va a cambiar, mientras él esté allí, es el ambiente peculiar, flamenco, y ese arrancarse a cantar espontáneamente que lo ha convertido en uno de los rincones más singulares de Sanlúcar.

Los datos de Taberna Ke Arte, en este enlace

Y además…

https://carnicaselalcazar.es/es/?utm_source=blog&utm_medium=Gif&utm_campaign=Verano&utm_id=CosasdeCome