Los boquerones en adobo de El Pescaíto
Tapa
Los boquerones en adobo de El Pescaíto
Tapatólogo descubridor:
Día de hallazgo
Ciencia
Descripción

La tapa es de las históricas, como Pepe Arcas, que también es un tapatólogo histórico de Jerez. Él puso al Colegio de Tapatólogos tras la pista de estos boquerones en adobo que son, ellos solos, una clase magistral de como se fríe el pescao, y, en particular, como se fríe el adobo, crujientito por fuera y jugoso por dentro, vamos que me emociono igual que un capillita delante de su Virgen.

Ahora, es que a los boquerones no les queda más remedio que estar buenos porque el trabajo que hacen con ellos los hermanos Gago, Enrique y Antonio, y la cocinera, Concepción Garrido, es casi de orfebrería porque les quitan las espinas y las cabezas uno por uno.  Estos boquerones son una tapa histórica y se sirven en el local desde hace 44 años cuando Enrique Gago García puso en marcha el primer “Pescaito” en la calle Santa María. 6 años después se trasladaron al local que ocupan actualmente en la calle Atalaya. La primera en guisarlos fue Luisa Rodríguez Collantes, su mujer y cocinera y ahora la misma fórmula la desarrolla su nuera Concepción Garrido. Ella explica las claves: tener los boquerones sumergidos poco más de una hora en el vinagre, que debe ser muy suave y luego bañarlos en la harina de El Vaporcito de El Puerto. Luego aceite muy limpio, porque esa es otra de las cosas que te llaman la atención de este pequeño bar restaurante, la limpieza, de esas que saltan a la vista desde que pisas la terraza exterior. Antonio y Enrique destacan que “el adobo que hacemos es muy suave porque el pescado que utilizamos es muy fresco y lo que tiene que hacer es resaltar el sabor y no taparlo”.  Los boquerones en adobo se sirven tan sólo en raciones y esta se cotiza a 7,50 euros. Advierto que cuando empiezas a comerlos, con las manos, y al grito de inn, no hay quien pare… vamos que me quedé con ganas de repetir si no fuera porque la gula es pecado y estamos en Cuaresma. El Pescaito cierra los martes, excepto en los meses de julio y agosto que abre todos los días.

Nota de los inspectores del Colegio de Tapatólogos: Las aceitunas aliñás están de escándalo y antes de los boquerones hay que pedirse una tapita de ensaladilla, también para nota. También tienen fama por los mariscos cocidos, pero ese día solo vimos las fuentes pasar, no le metimos mano.