Berza de judías verdes con calabaza y chicharitos
Receta
Berza de judías verdes con calabaza y chicharitos
Descripción

En la provincia hay muchas versiones de la berza y en cada población tienen, prácticamente, una característica. En Conil, aunque la receta también puede encontrarse en otras poblaciones, se hace esta que emplea productos muy característicos de su huerta como la calabaza o las habichuelas verdes. Si es temporada también se le incorporan chícharos (guisantes).

Esta versión corresponde a la Venta Melchor de El Colorao una de las mayores especialistas en cocina “de cuchara de la zona” y ha sido realizada por Petri Benitez, la jefa de cocina del establecimiento. La realizó para ser degustada en el Homenaje a la cuchara que se celebró en Conil en Septiembre de 2009, un encuentro gastronómico organizado en este establecimiento por la empresa Compuertas y la revista Cosas de Comé y donde se recuperaron recetas tradicionales de La Janda. La fórmula ha sido recuperada por Juan Carlos Almazo, copropietario de la Venta y profunda conocedor de la cocina de la zona.

Ingredientes

Ingredientes (Para 4 personas)

  • 500 gramos de judías verdes troceadas.
  • 100 gramos de garbanzos  de Vejer
  • 100 gramos  de Judías Blancas.
  • 100 gramos  de chicharos (guisantes)
  • 250 gramos  de patatas frescas troceadas.
  • 250 gramos de calabaza.
  • Un vaso de Aceite de Oliva Virgen.
  • Una mata de hierbabuena.
  • Una cabeza de ajo troceada.
  • Un choricito de El Bosque.
  • Pimentón dulce.
  • Sal.
  • 250 gramos de panceta de cerdo.
  • 500 gramos de costillas  de cerdo.
Elaboración

La noche antes ponemos en remojo, por separado las habichuelas y los garbanzos en agua con sal. Ya el día siguiente, cuando se haga el guiso, se ponen todos los ingredientes, excepto las patatas y la calabaza, en una olla. Se echa agua mineral hasta cubrir y se deja cocer. Cuando ya esté en su punto (las legumbres estén tiernas) se le agregan las patatas y la calabaza troceadas. Se deja cocinar hasta que las patatas estén tiernas. Una vez esté la berza lista para comer se monta el plato con su correspondiente pringá que irá al centro de la mesa para que los comensales se sirvan al gusto. Es mejor hacer la berza el día antes de comerla y calentarla antes de servirla al fuego suave.