El Edificio de El Gallo Azul, uno de los iconos de la ciudad, se inaugura en el año 1928. Lo construye la Casa Domecq como regalo a la ciudad por la Exposición Universal que había en 1929 en Sevilla. Desde el principio se dedicó a la hostelería para promocionar los productos de la bodega. El nombre de El Gallo Azul se debe a una pintura que realizó para decorar el local el pintor jerezano José Luis Torres, la cual todavía preside el mostrador del edificio. Los primeros en regentarlo, según señala el escritor Juan de la Plata en su libro “Los Tabancos y Ventas de Jerez” fueron Bartolomé Barroso y José Paz. A partir de 2008 el edificio pertenece al empresario jerezano Carmelo López Contreras, que también regenta la cervecería Gran Avenida . En marzo de 2013 fue el propio Carmelo López el que también se hizo cargo de la gestión del bar restaurante. (más información aquí). Desde abril de 2016, de la gestión se encargó Jesús Villanueva. En la actualidad el establecimiento es del empresario Gonzalo Assiego, que también ha abierto Mulai en La Pescadería Vieja.

El edificio está considerado como una de las obras cumbres del neomudejar en Andalucía. Lo diseñó el arquitecto Aníbal González.

Informaciones sobre El Gallo Azul anteriores a 2017, pulsando aquí.