Celebramos el Día de San José recordando a aquellos hijos que han ‘heredado’ oficio de sus progenitores.
Prácticamente han nacido entre fogones. Llevan toda una vida viendo a sus padres luchar en la hostelería y han decidido seguir sus pasos, en muchos casos tras un periodo de aprendizaje del que han vuelto trayendo nuevos aires al negocio familiar. Con motivo de San José, Día del Padre, recordamos a algunos de los ejemplos de padres e hijos que trabajan juntos en establecimientos gaditanos. Hay que reconocer que a algunos la carga genética gastronómica les viene por los dos lados, pero hoy es del día de los papás. De las madres ya hablaremos en otro momento…
Cabo Roche
Pedro Pérez Seijo junto a sus hijos, José María (izquierda) y Diego Jesús (derecha).
Pedro Pérez Seijo abrió Cabo Roche en 1991. Al proyecto se unió la segunda generación de la familia. Su hijo Diego Jesús Pérez Reyes, formado en la Escuela de Hostelería de Conil, destacó muy pronto en el concurso anual de la ruta del atún y ejerce como jefe de cocina; con 28 años ya había conseguido tres premios. Su hermano José María trabaja en la sala.
La Duquesa
La familia de La Duquesa
Carmen Prieto González y Andrés Rodríguez Sánchez abrieron La Duquesa de Medina Sidonia en el año 86. Su hija, Miriam Rodríguez Prieto, se incorporó en 2013. Antes, se había formado en la prestigiosa Escuela Hofmann de Barcelona, y había realizado estancias en el El Celler de Can Roca, de los hermanos Roca, considerado en la actualidad como uno de los mejores restaurantes del mundo y con tres estrellas Michelín.
Blanco y Verde
La familia del Blanco y Verde
José Trujillo Gómez, ya jubilado, y Antonia Moreno Ramirez abrieron en 1982. Lo que era un disco pub se acabó transformando en un restaurante con hotel. El hijo de ambos, Diego, formado en el restaurante, se encarga de la sala, y ha sido un gran defensor del antiguo recetario de la familia, empezando por la cocina ‘para tiesos’ de la postguerra.
Venta Calderón
Salvador Muñoz padre e hijo
Salvador Muñoz hijo (se llama como el padre), con 25 años, se ha incorporado hace apenas un par de meses a la Venta Calderón con una lista de proyectos para renovar el negocio familiar, abierto en el 85. Salvador siempre ha querido ser cocinero, se ha formado en la Escuela de Hostelería de Arcos y ha realizado el grado superior en Sanlúcar. Durante sus estudios en Arcos consiguió el premio que distingue al Joven Cocinero más prometedor (más información aquí). Durante un año ha trabajado en un restaurante con una estrella Michelín, L’Antic Molí de Tarragona, hasta que ha vuelto a la Venta dispuesta a dar nuevos aires al establecimiento (más sobre la nueva etapa, aquí). Desde estas líneas, el joven cocinero quiere dejarle un mensaje a su padre. Allá va: «Feliz Día del Padre de parte de tu hijo».
Taberna La Sorpresa
Los dos Juan Carlos Borrell de La Sorpresa
Juan Carlos Borrell y su esposa, María José Muñoz Leonicio están al frente de un establecimiento del casco histórico de Cádiz resucitado en 2014. La incorporación de la segunda generación, Juan Carlos Borrell hijo, formado en la Taberna del Alabardero de Sevilla y ya con experiencia adquirida en diferentes restaurantes del país, ya ha empezado a notarse en La Sorpresa: recientemente pusieron en marcha una curiosa iniciativa, La Mesa Roja, todo un menú degustación elaborado sin más cocina que una tostadora (más información aquí).
Casa Mané
Los dos Juan Manuel Laza
Este caso es un poco diferente: padre e hijo fundaron juntos el negocio. Juan Manuel Laza González y su hijo Juan Manuel Laza Avilés, ambos con experiencia en el mundo de la hostelería, se hicieron cargo del local el 1 de junio de 2005. Antes, esta casona de madera situada a pie de playa en Los Barrios había estado a cargo de otro local de prestigio de Palmones, el restaurante Willy. Más información sobre Casa Mané aquí.
El Copo
Manolo Moreno con sus hijas Estrella, Gema, Vanessa, Divina e Isabel
Seguimos en Los Barrios. Manolo Moreno Rojas y María Rosario Sánchez Rivera fundaron el Restaurante El Copo en el 1979 y se ha convertido en toda una institución en la localidad. Poco a poco, algunas de las hijas de esta familia numerosa se han ido incorporando al negocio. Divina, Vanessa, Gemma y Estrella se ocupan ya de la gestión. Más sobre este establecimiento aquí.
Francisco La Fontanilla
Volvemos a Conil de la Frontera para nuestra siguiente historia. Francisco, el que da nombre a Francisco La Fontanilla, es Francisco Alba, quien fundó este establecimiento situado a pie de playa allá por la década de los sesenta. Desde hace años, es su hijo Bartolomé Alba Rubio el que se encarga de la parte gastronómica del negocio mientras que su hermana, Marise, lleva la administración. Precisamente, el restaurante celebró hace pocos años sus bodas de oro con la publicación del libro Raíces de Sal, en el que se narra su historia (pulsa aquí para ver más).
Bar Juanito
Rocio y Cristina junto a su padre, Faustino
Juan Rodríguez Velázquez, Juanito, y su mujer Dolores Marín Morales abrieron en el 43 un establecimiento que ha acabado convirtiéndose en todo un referente en Jerez, el Bar Juanito. El negocio original se trasladó en el 82, tras la muerte de Juan, a su actual dirección en Pescadería Vieja, ya bajo la gerencia de su hijo Faustino. La tercera generación de la familia, representada por las hermanas Rocío y Cristina, están ya al frente del negocio. Más sobre la historia de este establecimiento aquí.
Casa Bigote
César y Fernando Hermoso.
Fernando Hermoso Orcha abrió Casa Bigote, entonces una pequeña taberna para marineros que sólo despachaba vino, en el año 51. Fue la segunda generación, los hermanos Fernando y Paco Hermoso Marín, los que darían al giro al establecimiento en 1971, cuando empezaron a servir algunas tapas de guisos marineros y pescados fritos. Ahora está al frente de las cocinas la tercera generación de la familia, representada por César, el hijo de Fernando.
Pastelería La Tarifeña
Terminamos con el postre y en Tarifa: Fue José Bernal, el abuelo de la actual generación que comanda el obrador, el que fundó la Pastelería La Tarifeña en 1956, en principio junto a la plaza de abastos de Tarifa, cerca de la ubicación actual a la que se trasladarían en 1976. Su hijo, José Bernal Blanco, amplió notablemente la fama y el recetario de la familia y ahora son sus hijos José Antonio y Carlos Bernal Chamizo los que ejercen de maestros pasteleros. Más sobre la pastelería aquí.
